la oracion

Mamá y yo estábamos algo inquietas y no podíamos identificar el porqué, entonces cogimos nuestras manos y nos dispusimos a orar. Mamá oró por cada una de sus hijas y por sus hogares, fue muy específica en su oración, ella conoce el corazón de sus «cachorras»; luego yo cerré la oración agradeciendo a Dios por sus muchas bondades. 

Después de la oración conversamos un poco y reconocimos sentirnos más aliviadas. Continué mis actividades y de pronto escuché a mamá comentar: «Cuando te comunicas con Dios te sientes mejor. El nos escucha»

Su comentario me enterneció mucho y con una sonrisa en el rostro afirme su expresión.

Filipenses 4:6-7 «No se aflijan por nada, sino preséntenselo todo a Dios en oración; pídanle, y denle gracias también. Así Dios les dará su paz, que es más grande de lo que el hombre puede entender; y esta paz cuidará sus corazones y sus pensamientos por medio de Cristo Jesús.» 

El poder de la oración. Dios es bueno.

Inspiración Adelita de Alcázar. Mujer Sabia Edad de Oro.

Lindo inicio de semana.