Adán y la Soledad

A Adán le tomó tiempo encontrarse con su complemento.
Antes de ese encuentro, su vida fue edificada a través de asignaciones en un espacio apartado para su crecimiento personal.
En soledad, él descubrió realidades esenciales:
sus pasiones, su propósito y, sobre todo: el conocimiento de sí mismo.
Y así como Adán: …. Moisés, David y muchos otros fueron formados en silencio.
Allí, Dios trabajó internamente su carácter, identidad, dependencia, y obediencia.
La soledad suele verse como una señal de que algo va mal. Y este pensamiento ha llevado a muchos a desesperarse y a tomar caminos que los han alejado de su verdadero destino.
Hay personas casadas que no son felices, y solteros que tampoco lo son.
Tal vez, hay un malentendido sobre el plan original de Dios.
Lo cierto, es que no existe registro de que Adán pidiera una compañía, él ni siquiera esperó algo . En realidad, la necesidad fue vista por Dios (Genesis 2:18), quien en su momento orquestó un bello encuentro.
#reflexiones
Pame Alcázar


