LA FE NO ES UN MOLDE

Un pensamiento absolutista o categórico no es racional.
Toda lectura, estudio o interpretación debe dejar siempre espacio para la reflexión y por supuesto para la excepción.

Una brillante maestra dijo una vez:

«Si por temor a que los jóvenes usen la excepción como excusa evito mencionar las excepciones a la regla, terminaré educando personas extremistas»

Este tipo de pedagogía —la del miedo— forma mentes rígidas.

Para evitar que piensen mal, se les priva de pensar por sí mismos.

Y así se les encierra en un pensamiento dicotómico.

La Biblia contiene doctrina y leyes, sí, pero no es rígida en sí misma.

A lo largo de las Escrituras, vemos excepciones que fueron guiadas por Dios:

📖 “Y el sacerdote dio a David el pan consagrado…” (1 Samuel 21:6). David no era sacerdote, pero por necesidad, se le permitió comer del altar.

📖 “Y el rey amó a Ester más que a todas…” (Ester 2:17)
Ester fue llevada a un palacio extranjero y se unió a un rey mayor. No era lo esperado según la ley, pero Dios escribió redención desde ese lugar improbable, la usó para salvar a su pueblo.

Y así hay muchos casos más…

La Fe NO es un molde.

Muchos enseñan con rigidez en lugar de sensatez.

Intentan evitar errores, sí, pero muchas veces eso refleja una falta de confianza en Dios… y en las personas.

Debemos guiar a todos a desarrollar una relación viva con el Espíritu Santo (sabiendo que Él es quien guía, convence y revela de forma personal una verdad). Además, es necesario que toda persona desarrolle el Pensamiento Crítico. Que sea capaz de discernir con cordura. No solo que repita patrones o normas.

Muchos no viven la vida que Dios diseñó para ellas porque están atrapadas en pensamientos dicotómicos.

El Señor traiga liberación.

#reflexiones

Pame Alcázar