Dile aDios al temor
Todos tenemos temores, dependiendo de nuestras vivencias cada temor tiene un nombre propio.
El apóstol Pedro en cierta ocasión decidió caminar sobre las aguas enfrentando un temor (Mateo 14:29) y nosotros podemos tomar ésto como un simbolismo de lo que representa hacer algo que para nuestra mente ya resulta imposible.
La historia dice que cuando Pedro vio el viento fuerte, tuvo miedo y entonces comenzó a hundirse. Y es que cuando le prestas atención a esa voz que te recuerda tu temor entonces literalmente SIENTES que te «hundes».
La mente es poderosa «lo que piensas que te pasará sí sucederá pero solo en tus emociones no en la realidad».
Pedro decidió caminar sobre las aguas pero en dirección a Jesús, él no enfrentó su temor solo, él pidió la ayuda de su Salvador. Entonces Jesús le tendió la mano, lo sujeto fuerte y le enseñó Fe.
El temor es un sentimiento real que nos hace sentir débiles, pero en nuestra debilidad Jesús se hace fuerte (2 Corintios 12:9-10) y nos enseña que El puede hacer que cosas hermosas pasen para ayudarnos a tener mas confianza, mas amor, menos temor.
La ternura y la presencia de nuestro Señor.
#nuncasolos
Pame Alcázar